La Arquidiócesis de Guadalajara pide encomendarse a la Virgen de Zapopan.
La Generala es “protectora contra rayos, centellas y peste”, señala en un comunicado
(...)
y poner “nuestra confianza en Dios, leemos en la Sagrada Escritura que ninguna hoja cae del árbol sin el consentimiento del Padre, por lo que nuestras vidas están en las manos de Dios”.
La Jornada, 28 de abril del 2009
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